Mariano Capellino fue consultado por la revista Apertura sobre la actual coyuntura de inversión en el mercado inmobiliario.  Su participación fue publicada en la página 10 de la Edición Especial de Real Estate. Edición Especial RE Apertura 20160520

 

¿Dónde hay oportunidades en los Estados Unidos?

Mientras en Miami la demanda ya no convalida precios, los inversores ponen el ojo en ciudades como Atlanta y Detroit.

Todo parece indicar que pasó el cuarto de hora para Miami. Si bien hoy la magia del marketing permite aún colocar unidades a US$ 6000/m2 en la zona de Brickell- Downtown desde el pozo, la demanda no está convalidando los US$ 4000/m2 que se ofrecen en los pisos terminados a estrenar, según brokers especializados. Números lejanos a los US$ 2300/m2 a los que se vendían entre 2009 y 2013, luego de la crisis. La buena noticia es que aún hay zonas que prometen buenos rindes en los Estados Unidos, con inmuebles que se venden al 60 por ciento del valor previo a la crisis como, por ejemplo, las ciudades en las localidades alejadas de la playa de Miami. Otras opciones son Georgia, Atlanta y hasta Detroit, que se está recuperando del peor ciclo de su historia. Con una estrategia adecuada y el conocimiento de mercado, se logran cerrar compras de propiedades clase B que son las que habitan la mayoría de las personas en los Estados Unidos en valores que podrían oscilar entre US$ 600 y 1000/m’ con adecuado potencial de renta y mucho para revalorizar antes de su venta, indican los expertos del mercado.

 

Cómo influye el movimiento del dólar en los precios inmobiliarios.

Las fluctuaciones del tipo de cambio pueden hacer perder dinero a quien invierte desde el pozo, explica un especialista.

Apostar o no apostar al pozo es una de las grandes disyuntivas. Atrás quedaron los tiempos en los que un inversor lograba revalorizaciones del 40 por ciento durante el transcurso de la obra. Hoy, y ante una posible corrección del tipo de cambio, existe el riesgo de que la propiedad terminada cotice por debajo del valor invertido. «Este es un negocio atado a tipo de cambio, lo que hace que siempre se esté atado al riesgo de la devaluación. Si en el proceso de obra se corrige, se pierde dinero», explica Mariano Capellino, uno de los fundadores y CEO de INMSA, compañía especializada en el gerenciamiento de inversión en activos inmobiliarios. Históricamente, en el país el costo de la construcción se movió entre los US$ 300 y los US$ 1000 el metro cuadrado, dependiendo del momento del ciclo. “El único escenario para invertir tranquilo es con un costo de construcción en la franja de entre US$ 300 y US$ 500. En esos valores, se está protegido ante posibles sobre-saltos del tipo de cambio”, afirma. Otro dato clave es que, a mediano plazo, en el caso de que el dólar suba más que la inflación, los precios en la Provincia de Buenos Aires se ajustarán más que en Capital, ya que es costo de construcción bajará y la incidencia de la tierra en esa área es más baja.